01-10-2023
Testimonio de nuestro voluntario Emilio
Emilio Miguel Moratal, es un voluntario que nos ha acompañado desde los inicios. Hace poco volvió a nuestras cocinas y escribió este post en su cuenta de Facebook.
Reme y Buñoleras sin fronteras , en mi recuerdo.
Hace ya 17 años o alguno más que Reme empezó a repartir bocadillos y comida con su furgoneta en la zona del Raval de Gandia a las personas que no tenían nada.
Más adelante y con un grupo de amigas , cogían la comida que les ofrecía el restaurante el Moli Canyar de Potries y las repartían por las calles de Gandia a los más necesitados.
Yo conocí a Reme hace 15 años cuando fui con mi padre a hacer unas paellas el día de reyes al preventorio de Gandia donde ella y su ejercito de buenas personas solidarias hacían los mejores buñuelos de el mundo, jamas comí ningún buñuelo mejor que esos, tanto amor en un buñuelo… es algo fruto de un sentimiento.
Se empezó a cocinar en un pequeño centro de los boys scoutts de Gandia , donde yo ya cocinaba hace 14 años para 200 personas sin recursos…. Paellas, lentejas , macarrones , fideuá, el jueves era mi día para ir y yo con mi equipo me lo pasaba genial.
Años después buñoleras paso por algún otro local hasta que tubo el actual centro que es ya muy bonito , amplio y con muy buenas instalaciones en el barrio del Raval a 55 metros de la casa de Reme.
Reme me fichó para colaborar con la recién formada asociación , Buñoleras sin fronteras la cual se reunía los domingos en la puerta de la Colegiata de Gandia o en otra zona de Gandia vendiendo buñuelos de calabaza .
El padre Puig , de la orden de los jesuitas de Gandia ,mi amigo, era una persona que estaba muy involucrada en este proyecto.
Recuerdo cuando hace años abríamos el centro a las 5 de la mañana y ella siempre fiel a su compromiso con la sociedad de Gandia y los más necesitados estaba todos los días al pie del cañón trabajando solo por amor, con la firme creencia que en un pequeño acto de cada día, cada persona podemos cambiar el mundo y desde luego ella lo hizo, cambio el mundo tal y como lo conocemos y hoy, gracias a Buñoleras sin fronteras 150 almas de Gandia pueden sobrevivir .
Yo a veces la veía sentada y agotada por tanto esfuerzo, pero creo que si existe la santidad en la tierra ella sin duda lo es por que lo he visto con mis propios ojos ,crear de la nada el futuro de miles de personas que no tienen nada en la vida y Reme sin pensar en nada más que en los demás lo logro , saco la luz a las calles de Gandía, por donde no hay esperanza , buñoleras sin fronteras, está allí ,para siempre.
Hace poco me llamo el director del comedor Kiko para que cocinara varios días y no me lo pensé ya que no hay cosa mayor en el mundo que mi pasión por la cocina y mi vocación con el voluntariado,
Yo por supuesto dije que si, porque disfruto mucho y para siempre soy de buñoleras sin fronteras.
Ayer hubieron lentejas con carne y chorizo, lentejas veganas y para repartir, coliflores , alcachofas, acelgas , fruta ,empanadillas de Raúl, pan y otros productos de primera necesidad. Se sirve a un total de 160 personas de todas las edades, condiciones social y recursos.
Buñoleras for ever.
Es mi pequeño homenaje a Reme , el padre Puig y el voluntariado de buñoleras sin fronteras.
Y a todas las personas e instituciones que colaboran a diario en el presente y futuro de esta asociación de la comarca de la Safor.
Muchas gracias a todos y un sitio en el cielo Reme.